Con el tiempo, las personas han encontrado formas de comunicar pensamientos, sentimientos y emociones, y escribir y hablar son las formas más efectivas, pero ¿Qué sucede cuando escribes una palabra, una frase, una oración o un libro completo? ¿Habrá un destinatario que te lea? Evidentemente, esto es lo que todo escritor quiere que los demás lean lo que plasma, por simple que parezca, es para lo que sirve escribir, a la espera de un lector entusiasta que le dé voz al texto.
Cuatro habilidades comunicativas básicas
Las cuatro habilidades comunicativas básicas que tiene toda persona son leer, escribir, hablar y escuchar, en esta oportunidad se tratará el tema de la lectura porque es la base para que todos desarrollen y mejoren otras habilidades, conocimientos, interacción con el medio y entre pares. En México se encontró una gran caída en la lectura, esto se aplica principalmente al sector de la educación. Los estudiantes leen sin entender los signos o simplemente para completar una actividad dada por el maestro. Pocos estudiantes ingresan al mundo de la lectura por diversión, lo hacen porque lo hacen sus familiares los cuales los han educado así desde pequeños.
La pandemia mundial ha abierto áreas de oportunidad para la lectura, pero también ha demostrado que el mundo digital se ha convertido en una base fundamental para la continuidad de la vida cotidiana, la comunicación, la información, el conocimiento y el acercamiento de las personas a los seres queridos en la distancia. En el pasado, poseer un dispositivo electrónico o Internet parecía ser solo apto para un determinado segmento de la población, ahora pertenece a la mayoría de los adolescentes, acercándolos al acceso rápido a información y entretenimiento, y dejando de lado el texto impreso. . .
Digital o impreso
¿Qué prefieren los estudiantes? Sin duda, optarán por la digitalización, que permite a los alumnos interactuar con su entorno y las personas a través de herramientas digitales como plataformas, blogs, redes sociales, etc.
Los recursos digitales permiten la colaboración porque tienen diferentes características y usos. Según Townsend (2000), citado en Quirós (2009), estos recursos se clasifican en: transitorios, proactivos e interactivos. Los recursos digitales apoyan la entrega de información y permiten la interacción, la experiencia y la reflexión para construir conocimiento; pueden usarlos tanto de forma sincrónica como asincrónica para interactuar con otros, lo que permite a los estudiantes formar comunidades de aprendizaje y fortalecer las habilidades y destrezas que ya tienen.
Las redes sociales brindan información a los usuarios a través de plataformas de comunicación en Internet, permitiéndoles generar perfiles utilizando datos personales, facilitando así la creación de comunidades que permiten la comunicación
Cuando las redes sociales se utilizan para fines distintos a aquellos para los que los docentes las crearon o proporcionaron, contribuirán en gran medida a garantizar que los estudiantes logren el aprendizaje previsto y fortalezcan sus habilidades básicas de comunicación.
Los grupos de WhatsApp son una ventaja, gracias a los cuales puedes intercambiar libros en PDF de diferente extensión, ya que a veces comprar libros es un poco difícil por la región, la economía y el desinterés por la lectura. Quien siempre agrega que leemos, pensamos y por lo tanto mejoramos nuestros estándares, comparamos nuestras ideas, las cuestionamos y aun así aprendemos sin buscarlo. Esto significa que la lectura se realiza independientemente de la extensión.